Dice Miguel Ángel Montenegro, profesor y exdirector del colegio Heidelberg, en Las Palmas de Gran Canaria, que los alumnos aprenden de tres tipos de maestros: en primer lugar, de ellos mismos y de sus iguales, porque “conocerse a sí mismos y saber regular sus sensaciones y emociones es imprescindible para su desarrollo”. Como “segundos maestros” aparecen los padres, profesores y demás adultos presentes en sus vidas, inculcándoles conocimientos, valores y normas que les ayudarán a convertirse en adultos responsables. Pero luego menciona, recordando al pedagogo Loris Malaguzzi, al “tercer maestro’, que no es sino el entorno en el que se encuentran, “pues en él los niños desarrollan sus experiencias, exploran y se preguntan por el mundo que les rodea”.
