Bolivia fue entre 2012 y 2014 el país sudamericano con las mayores reservas internacionales en relación con su PIB. Hoy, el Banco Mundial pronostica que solo Venezuela tendrá un crecimiento económico más lento que Bolivia en los próximos años. La bonanza de aquellos viejos tiempos se debió a los ingresos por la exportación de gas. Pero las malas políticas y la falta de inversión terminaron por diezmar el recurso. El gran reto para el futuro presidente, que se elegirá este domingo, es encontrar un modelo para aliviar la peor crisis monetaria en 25 años.
